con su tiempo libre, los plantadores, entre reproducción y reproducción, experimentan con las plantas: hacen popurrí, las fuman, las muelen hasta hacerlas polvillo. ese polvillo lo mezclan con agua y otras cosas y logran hacer la masa cruda de las tortas exquisita, que comen siempre después de fumar otras plantas.
los ex-reproductores también empiezan a fumar algunas plantas, pero sólo los días sábados a la noche. esto les genera una resaca que los dota de una actitud contemplativa. y empiezan a recordar.
durante una noche bastante larga, los plantadores descubren el fuego.
recuerdan sus días de reproductores dominantes
descubren también que exprimiendo algunas plantas sale un líquido.
recuerdan su humillación frente a los plantadores que los esclavizan
descubren que pueden calentar ese líquido en el fuego.
recuerdan los días en que todos estaban en un charco cósmico
hunden una masa parecida a la masa de las tortas exquisita, de diez centímentros de largo, con forma de estrela prismática, y ven que se dora de manera perfecta.
recuerdan cuando su equipo no era el mamarracho que ven ahora en la televisión de un bar y al que le meten un gol diez segundos antes que un ex-reproductor muerda la corteza de un churro recién frito y se termine el mundo del caos.
N-/10:25 p.m./ 0 Comentarios